lunes, 10 de marzo de 2014

10M


Esta mañana he vuelto de pasar el fin de semana en Madrid. Esta mañana, llegando a la Estación de Puerta de Atocha y frente al monumento a las víctimas al que me es imposible ignorar he caído en la cuenta de que hace justo 10 años volvía de Madrid también un 10 de marzo. A la mañana siguiente me despertó el llanto de mi madre ante el horror de las imágenes ya imborrables del 11M. Ahí estuvimos los dos horas, frente al televisor y con un nudo en la garganta y el garganta mientras a escondidas borraba de mi mente el pensamiento casi culpable de "podría ser yo".
Hoy, por puro azar y por esos caprichos que tiene la vida veté tuba saber porqué he vuelto a repetir el trayecto en AVE. Y al recordar este triste décimo aniversario ha vuelto el nudo a mi garganta y a mi alma. 
A veces la vida tiene una manera extraña de mandar sus mensajes...